Un trabajo meticuloso y muy entretenido, pero que dio sus frutos, al ver esas lindezas de cajas que os quedaron.
Fue una mañana tranquila y agradable, haciendo una de las cosas que más nos gusta... hacer cosas preciosas con nuestras propias manos.
Si recibes un regalo dentro de esta preciosidad de caja, el regalo tiene el éxito asegurado. Y si no sabes que regalar a alguien, qué mejor que una caja personalizada hecha con tus propias manos, ese es uno de los mejores regalos que pueda recibir alguien, tu tiempo tu dedicación y tu cariño puesto en esa caja, que puede ser navideña, con motivos marineros, vintage...
Os esperamos en el siguiente taller ;) queridísimas talleristas.
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